Las casas, como la ropa, pasa de moda con los años, y aquellos espacios que tanto os gustaban hace un tiempo puede que acaben resultandonos aburridos, así que se impone la necesidad de renovarlos con un buen plan de reforma de interiores. Puedes cambiar mil aspectos de tu casa sin tener que afrontar los engorros de una reforma integral, sin licencias, contratistas ni escombros ensuciando tu casa de por medio.

Ideas para una reforma de interiores

Una reforma de interiores puede suponer un cambio completo del aspecto de una vivienda (si se varía toda su decoración) o mejorar algún aspecto concreto que nos moleste especialmente, como unas paredes con un aspecto anticuado o unos muebles de cocina poco funcionales o feos. A poca habilidad que tengáis en el campo del bricolaje, seguro que hay miles de pequeños cambios que podréis hacer sin gastar mucho dinero ni requerir de la ayuda de profesionales, así que ahí van unas cuantas ideas para lograrlo:

  • Renueva la cocina: La cocina es una zona de la casa que se usa muchísimo, y sentirnos bien en ella es importante, por lo que quizás sea necesario darle un aire actualizado, pero para ello no hace falta cambiar todo el mobiliario ni nada parecido. Se pueden lograr resultados magníficos cambiando las puertas de los armarios, colocando encimeras nuevas o dando color a las paredes, ya sea con vinilos decorativos o pintando sobre los azulejos.
  • Cambia los suelos. Un suelo nuevo cambia por completo el aspecto de una estancia, y ahora existe la posibilidad de instalar suelos sobre los anteriores de manera muy simple: desde losetas vinílicas a moqueta adhesiva o suelos de lamas de madera o de imitación que se ajustan en un click, hay muchos tipos de suelo que todos podemos aprender a instalar y que además son baratos.
  • Empapela las paredes. Aunque hace unos años el empapelado parecía cosa del pasado, hoy se ha vuelto a poner de moda, y se venden papeles pintados preciosos y súper originales adaptados a todo tipo de estancias: para salones, para dormitorios, para zonas infantiles…, e incluso para cocinas y baños, ya que los hay vinílicos y resistentes al agua. Algunos de ellos son autoadhesivos y de muy fácil colocación.
  • Viste tu casa. A veces basta con darle color al mobiliario para que la estancia tenga un aspecto completamente distinto. Compra un juego de sábanas nuevo, un edredón divertido, una mantelería o cambia las cortinas, o pon unos bonitos cojines sobre ese sofá que no está en mal estado pero que te resulta tan aburrido. Aprender qué colores dan luz, cuáles aportan seriedad, cuáles aportan frescor… es lo más importante, pero una vez aprendido, todo es posible.

Nuestro consejo

Lo principal es, en todo caso, que os dejéis aconsejar. No sólo hay muchas ideas prácticas en la red, sino que varias tiendas de bricolaje que ofrecen cursos de técnicas de construcción de manera gratuita, y también podéis coger muy buenas ideas de programas de televisión en los que se hacen pequeñas reformas exprés, pero siempre teniendo en cuenta que las reformas no son reversibles, así que mejor practicad un poco antes de lanzaros. Id de menos a más, empezad por lo más simple e id añadiendo cosas, así nunca os equivocaréis.